Al elegir los materiales para la renovación de una casa, debes poner especial atención a lo que tiene que ver con el suelo de jardín, ya que este espacio estará sometido a diferentes circunstancias como por ejemplo las inclemencias del clima.
Los suelos exteriores deben tener ciertas características que combinen la practicidad, la durabilidad y la belleza, de tal forma que se pueda armar un espacio perfecto y confortable para disfrutar tanto del verano y registrar en tu memoria experiencias familiares inolvidables.
¿Qué es un suelo para jardín?
Un jardín debería ser un oasis donde prevalezca la armonía y belleza, por tal motivo cada detalle debe ser tomado en cuenta y manejado con mucho mimo para lograr un lugar perfecto. Uno de los componentes más importantes en el diseño es sin lugar a dudas el suelo para jardín.
El suelo para jardín debe estar construido para resistir la humedad, el sol y los cambios de temperatura. Por tal motivo, sus materiales aguantar los rigores del clima pero además deben servir para cohesionar todos los elementos que componen el exterior.
¿Qué características deben tener los suelos exteriores para jardín?
Los suelos exteriores para jardín deben reunir ciertas características de durabilidad en ambientes adversos pero también deben combinar esa resistencia con la belleza y practicidad. Si estás pensando en hacer una renovación en tu jardín aquí te mostramos cuáles son las características que deben tener estos pisos.
- Resistencia: Los pisos para patios deben estar conformados con materiales que puedan soportar los cambios de temperatura o embates climáticos, ya que algunas baldosas pueden resquebrajarse si son sometidas a los 40°. También deben ser resistentes a la humedad, ya que un jardín está expuesto a la lluvia o a una manguera cuando riegas tus plantas. Por otro lado, el material de los suelos de jardín, están elaborados para resistir los embates del sol de tal forma de evitar la decoloración y el desgaste por la exposición a rayos uv.
- Fácil mantenimiento: Si eres de los que quieren mantener toda tu casa impoluta, seguramente no querrás tener un jardín que necesite mucho mantenimiento. Los pisos de jardín deben ser cómodos y fácil de limpiar.
- Fácil instalación: Para que tu suelo para patio sea perfecto, debe ser instalado de manera impecable, ya que cada detalle se puede notar y echar por la borda todo el esfuerzo por tener un patio de ensueño.
- Diseño: Este aspecto es muy importante ya que además de reflejar tus gustos personales, también debe conjugar bien con el resto de la decoración. Por esta razón, es importante conseguir una armonía entre la practicidad y belleza de todo el entorno.
¿Qué tipos de pavimentos para exterior existen?
Cada día las nuevas tecnologías nos ofrecen diferentes opciones de productos que combinan la estética con la calidad. De allí los diversos tipos de pavimentos para exterior que existen y que se pueden adaptar a cualquier gusto, desde pisos de piedras naturales hasta las baldosas con excelentes acabados.
Hormigón impreso
El hormigón o concreto es uno de los productos más utilizados en la construcción debido a su versatilidad. Entre sus componentes están el cemento, el agua y la grava o gravilla.
El hormigón impreso es un tipo de revestimiento que es sometido a un tratamiento especial donde se plasma un diseño, a través de moldes y otros aditivos que definen su color y textura. Gracias a sus características es muy usado en pisos para patios.
La elección de este tipo de material para revestir el piso exterior de tu casa, supone una serie de ventajas como resistencia, durabilidad y la estética, pero además es económico, duradero y fácil de instalar. Sin embargo la gran desventaja es su baja resistencia al esfuerzo de tracción, por lo que se recomienda incluir varillas o mallas en su construcción.
Suelos de ladrillo
Un piso para patio hecho de ladrillos puede funcionar para quienes desean un aspecto rústico es su jardín. Es muy resistente y duradero lo que lo hace ideal para casas donde hay muchas personas conviviendo a la vez.
Los pisos de ladrillos son ecológicos, son resistentes a la intemperie y al fuego y es de bajo mantenimiento. Sin embargo, pueden ser más caros que otras opciones de piso y tienen limitaciones en cuanto a colores y tamaños.
Hormigón desactivado
Este tipo de suelo para patio consiste en una mezcla de agua, cemento y arena o arenisca, lo que lo hace rugoso. Su particularidad radica en que se dejan a la vista los materiales como las piedras y su cualidad antideslizante.
Entre las muchas ventajas tenemos, lo asequible por su precio, fácil instalación y durabilidad. Hoy en día se utiliza en casi cualquier lugar, pero es el preferido de aquellos que buscan un terminado acorde con una decoración tipo industrial. Además soporta muy bien las variaciones de temperatura.
El suelo para patio hecho con hormigón desactivado tiene como virtud que se puede elegir el color que más te guste, entre sus variedades está el rojo, negro, verde, marrón o arena, lo que es ideal para poder combinar el piso con el resto del diseño.
Piedra Natural
Es un material muy noble por lo que es muy conveniente para usarlo en suelos de jardín. Entre los diferentes tipos de piedra natural tenemos la pizarra y la cuarcita. Pero cada una tiene sus particularidades a tomar en cuenta.
- Pizarra: Es una piedra de grano fino muy popular en las construcciones modernas por su alta resistencia y versatilidad. Su gran cualidad es la impermeabilidad, razón por la cual es ideal como suelo de jardín La desventaja que tiene es que no aísla bien la temperatura por lo que en verano absorbe mucho el calor y en invierno el frío.
- Cuarcita: Son rocas metamórficas ideales para pisos de jardín por su alta resistencia y durabilidad. Sus atributos están en la variedad de colores y texturas que van desde el liso a ligeramente rugoso y sus propiedades impermeables.
Entre las desventajas que puede tener está lo complicado para instalarlo ya que las lajas naturales tienen formas irregulares.
Suelos cerámicos
Los suelos cerámicos probablemente son los más versátiles en cuanto a la variedad de diseños. En lo que se refiere a los pisos de cerámica para suelos de patio, también podrás encontrar distintos tamaños, colores y diseños sin sacrificar la calidad.
Entre las ventajas de usar cerámica en suelos para patios están su durabilidad y fácil mantenimiento. Por otro lado, la mayoría de estas baldosas vienen recubiertos con una capa protectora que sella los poros y la hacen impermeables al agua y resistentes a las manchas.
Es de muy fácil mantenimiento ya que sólo basta con barrer, aspirar y coletear de forma periódica para conservar el brillo y color original. Por otro lado, a pesar de que son un poco más costosas su gran variedad de diseño y durabilidad justifican su inversión.
En cuanto a las desventajas del suelo para pisos de cerámica, son la complejidad en su instalación, ya que para que pueda lucir bien debe ser colocada de manera impecable, por lo que se recomienda la contratación de expertos en la materia Además, la dureza y frialdad de su superficie puede convertirse en una desventaja para algunas personas.
¿Cuáles son los precios por metro cuadrado?
La inversión en suelos para patios o jardines va a depender de tu elección, y las características y atributos de cada uno. Los costes están en el rango de entre los 20 y 70 euros.
Si te estás decantando por las baldosas de gres antideslizante las puedes encontrar por unos 10 o 25 euros el m2.
Si por el contrario deseas un suelo de hormigón impreso, este puede variar según la técnica y puede oscilar entre los 21 euros m2 y 24 euros el m2. Por otro lado el piso de gres porcelánico está valorado en unos 15 euros el m2.
Muchos osados deciden ahorrarse un dinero extra instalando ellos mismos el piso de su patio, sin embargo algunas técnicas necesitan de manos experimentadas por lo que se recomienda contratar a un profesional los cual equivaldría a unos 12 a 15 euros el m2.
¿Qué tipo de suelo para jardín elegir?
El suelo para el jardín de tu casa, es tan importante como el piso del interior. En este espacio construyes recuerdos con tu familia y probablemente permanecerá por un largo contigo. Por esta razón es importante que tengas ciertas consideraciones al momento de elegirlo.
Primeramente debes evaluar las características del lugar y para qué actividades va a ser destinado. En el caso del jardín, es importante que tenga propiedades antideslizantes, que se adapte al diseño del resto de la casa y que sea resistente a las inclemencias del clima.
En segundo lugar, debes tener presente tus preferencias en cuanto a diseño y comodidad, teniendo en cuenta que debe armonizar con el resto de la decoración de tu casa, pero teniendo en cuenta los materiales que son más convenientes para el espacio.Y en último lugar, debes tener en cuenta los costos.
Es necesario que precises de antemano la cantidad de dinero con el que cuentas para poder escoger entre la variedad de suelos para jardín que existen. Seguramente encontraras el que más se adapte a tu presupuesto.